tomate un ratito.
Imaginate un momento ideal. De esos que pondrías en un cuadrito.
Puede ser tomando un rico café con un delicioso muffin en tu bar favorito o tirada en la playa tomando un trago de esos super elegantes mirando el cielo super azul. O mirando los muchachos, vos elegís.
Puede ser viajando por el mundo conociendo nuevas culturas o enseñando a un grupo de chicos de 6 años a hacer origami.
Pueden ser cosas chiquitas. ¿Hace cuánto que no hacés tu actividad favorita? Andar en bici, leer una revista, ir al cine, tomarte un jugo de naranja recién hecho.
Pueden ser planes de vida. ¿Qué pensás que vas a estar haciendo de acá a cinco años?
Extraño pasar la tarde con una amiga, tomando algo y hablando de nuestras cosas. Hace unos años solía irme los sábados con una amiga al Parque Rivadavia y nos pasábamos toda la tarde ahí, curioseando los libros, comprando algunos y tratando de vender lo que llevábamos para volverlo a gastar en otros libros. También extraño salir a tomar algo con mi novio (hoy es mi esposo). Vivir cumpliendo responsabilidades nos obliga a dejar de hacer lo que nos da mas placer. =/
¡Romina! Ya te andaba extrañando en esta serie. 😀 Lindo verte.
¿Y una vuelta a la plaza con el novio? 😉 Hagan picnic. Gasolero y poco tiempo pero recargador de pilas. Te lo digo por experiencia propia.
Bueno, te cuento que el otro día, aprovechando que volvió temprano de trabajar, me propuso salir los tres a tomar un helado. Nos compramos un cuarto y nos lo llevamos con tres cucharas a la plaza que estaba cerca de la heladería. Lau estaba loca de contenta. Y a nosotros también nos vimo muy bien desenchufar un poco.